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TURTZIOZ

Turtzioz, situado en la comarca de Enkarterri, combina un valioso patrimonio monumental con un entorno natural de enorme belleza en el que destaca el Parque Natural de Armañón. El recorrido por el municipio permite descubrir edificios históricos, construcciones tradicionales únicas y paisajes que conservan la esencia más auténtica del valle.

La visita puede comenzar en la iglesia de San Pedro de Romaña, junto a la cual se encuentra una plaza de toros. Frente al templo, ocupando una posición privilegiada en el valle, se levanta el Palacio La Puente, un elegante edificio barroco clasicista del siglo XVIII que albergó en 1937 la última reunión del Gobierno Vasco antes del exilio. Muy cerca, por la parte posterior de la iglesia, se encuentra el Palacio de Tueros, una construcción barroca del siglo XVII que conduce hacia el barrio de Gordón. Allí se alzan la ermita de la Trinidad y su peculiar plaza de toros, un conjunto que tiene su réplica en el barrio de San Roque, donde la ermita dedicada a este santo cuenta también con su propio coso taurino.

En el barrio de Pando se conserva uno de los elementos civiles más singulares del municipio: la Torre de Pando, que mantiene intacto su aspecto de antigua construcción militar. En esta misma zona se puede apreciar otro de los símbolos de Turtzioz, el caserío trucense. Este tipo de vivienda rural, surgido en el siglo XVII en la zona occidental de Enkarterri, combina características del caserío vasco y de la casa montañesa, dando lugar a un modelo híbrido único en la región. Cerca del área recreativa del barrio se encuentra además una joya preindustrial: el Calero.

 

Esta estructura troncocónica de mampostería servía para producir cal mediante la combustión de caliza, esencial para las labores agrícolas, las construcciones y la prevención de plagas. Hoy, en su parte superior, se ha habilitado un mirador desde el que se divisa la vega del río Agüera.

Continuando hacia el barrio de Basinagre aparece un conjunto residencial y productivo representativo de los grandes mayorazgos de la nobleza trucense. El enclave reúne un palacio, las ruinas de una ferrería, un molino del siglo XVIII aún en funcionamiento, la casa del molinero, la del administrador y un puente que formaba parte del antiguo Camino Real, componiendo uno de los conjuntos históricos más interesantes del municipio.

Turtzioz comparte con el valle de Karrantza la titularidad del Parque Natural de Armañón, un espacio de gran valor ecológico al que se puede acceder desde el barrio de Cueto. En este entorno se encuentran la ermita de La Caridad con su plaza de toros, la casa palaciega de Tueros, el pozo del antiguo palacio y un conjunto de casas alineadas que mantienen la arquitectura tradicional. El área destaca por su baja intervención humana, su abundante masa forestal y una rica variedad de fauna, con especial mención al robledal de Remendón, uno de los más extensos y mejor conservados de Bizkaia.

Desde este punto es posible ascender hasta Armañón, una cumbre redondeada donde pastan caballos, pottokas, ovejas y vacas en amplios prados de montaña.

 

También se puede alcanzar la cima de Los Jorrios, atravesando un encinar muy bien conservado, o recorrer las famosas Peñas de Ranero, que completan un paisaje de gran interés geológico y natural. Turtzioz se presenta así como un destino que combina historia, arquitectura tradicional y naturaleza en estado puro.

CÓMO LLEGAR

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